El cuero cabelludo es la parte de la piel del cuerpo donde se concentra la mayor cantidad de pelos, en términos de densidad, denominado cabello. El mismo tiene características especiales y debe, por lo tanto, ser tratado como tal. Presenta una piel de color rosado (dependiendo de la raza de la persona) y sin alteraciones.
La piel del cuero cabelludo tiene una espesura intermedia, entre la piel de la pálpebra, que es la más fina, y de la región de la nuca, que es la más espesa. Es el local de asentamiento de, aproximadamente 150.000 folículos pilosos, cada uno con una hasta pilosa y una glándula sebácea. Es, por lo tanto, un lugar de intensa actividad metabólica en la producción del sebo y en la actividad del ciclo capilar, contemplando las fases anágena, catágena y telógena del cabello. Es un área homogénea y, cuando está saludable, no presenta alteraciones.
¿Qué puede aparecer de equivocado en el cuero cabelludo?
Cualquier alteración de volumen en el cuero cabelludo debe ser evaluada por el médico, pues puede ser una sencilla verruga, un quiste sebáceo o inclusive un tumor. Si hay alteración de color y no de volumen, se debe tener atención si este color es rojizo o morado, pues esto puede indicar alteración vascular. En caso de que haya sangrado, ¡esta alteración debe ser examinada con urgencia, debido al riesgo de la pérdida exagerada de sangre! La presencia de un hemangioma (alteración vascular) puede ser, hoy, rápidamente tratada con laser.
Con relación a las descamaciones, las mismas pueden ser una sencilla pitiriasis furfurácea (descamación natural de la piel del cuero cabelludo) o un cuadro de dermatitis seborreica (caspa). Puede aún, en casos más graves de descamación, ser un cuadro de psoriasis, enfermedad que puede aparecer solamente en el cuero cabelludo o en todo el cuerpo.
Las infecciones bacterianas pueden aparecer también, pero son más raras y seguidas de calor en el local, de enrojecimiento y dolor.
Las áreas sin cabello pueden ser consecuencia de alopecia areata o de otras enfermedades denominadas alopecias cicatriciales (tales como la pseudopelada de Brocq y el lupus).
En los niños, pueden ocurrir cuadros de infección por hongos (micosis), lo que no pasa en adultos. Si un adulto presenta micosis en el cuero cabelludo es porque, probablemente, él tiene algún problema de deficiencia de inmunidad.
Cuando un profesional no médico, como un farmacéutico, tricólogo, peluquero o visagista, observe alguna alteración en el cuero cabelludo del paciente, lo ideal es preguntar a él si tiene conocimiento de la lesión. Discretamente, en local reservado y no en público, el profesional debe recordar al paciente que aquella alteración puede ser algo más importante de lo que piensa, y sugerir pasar por una consulta médica.
Las enfermedades del cuero cabelludo pueden ser clasificadas en tres grupos: las genéticas o metabólicas, las sistémicas y las infecciosas o adquiridas.
Las genéticas o metabólicas pueden englobar los tumores y las alteraciones de la pérdida de cabello.
Las sistémicas son aquellas que son la representación de una enfermedad interna, como una enfermedad auto inmune o lupus eritematoso.
Las infecciosas son las causadas por hongos (solo en niños), bacterias o virus.
Solamente las infecciosas son transmisibles, pues cualquier contacto puede pasar un hongo, una bacteria o un virus, por medio de la manipulación, con las manos, de instrumentos de trabajo no esterilizados adecuadamente.
Existen normas especiales de las agencias sanitarias para la esterilización de equipos e instrumentos de peluquerías. Lo ideal es que se tenga una autoclave (y no solamente una estufa) para la realización de este proceso.
Lo más importante, como todo lo que se relaciona con nuestra salud, es recordar que siempre es mejor prevenir que tratar las enfermedades, y que no debemos nunca ser negligentes con cualquier cuidado con la misma.
Extraido del original publicado en Cosmetics on line Latinoamèrica.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
si alguna de las imagenes son de su pertenencia - Envieme un mail y las retiro.
Archivo del blog
-
►
2009
(168)
- ► septiembre (14)
-
►
2010
(113)
- ► septiembre (11)
-
►
2014
(32)
- ► septiembre (1)
No hay comentarios:
Publicar un comentario